miércoles, 30 de marzo de 2011

Cuando todo cuesta un poco más...

Son muchas las cosas que rondan mi cabeza, y ninguna me ayuda a estar tranquilo. La mayoría de las veces distingo lo que es correcto de lo que no, y de cuando hay que hacer una cosa u otra... Lo malo es que, aun así, me es imposible hacer lo correcto todo el tiempo; y me escudo en que, si me distraigo, lo hago para los demás y no siempre es del todo cierto...

Quedan pocos días para mi examen y tengo la sensación de perder el tiempo y de no llegar... Se que tengo que hacer algo, pero no dejo de pensar en mi kiosco, la boda de Pili, el viaje de mi Padre, etc... Así es muy difícil... Se que todos me intentan ayudar a su manera, pero no se si será posible...

Voy a ver si dejo de entretenerme y me pongo a estudiar, que es lo que tengo que hacer y dejar de llorar: porque cuando todo cuesta un poco más, cuando es más difícil, es cuando merece la pena obtener una victoria. Espero que el resultado sea bueno.

No sabría cómo afrontar el fracaso.